El rincón de los pesaos

Pegar un Youtube no es compartir. Compartir es pegar un Youtube y aportar algo personal, una opinión, una información, una reflexión… o cualquier tontería que humanice la cosa. Eso es lo que haría un pesado, y yo lo soy.

Para no estropear cualquiera de vuestros bonitos hilos he decidido abrir uno. Será muy bienvenido aquel al que le guste compartir algo, me encantarían vuestros comentarios sobre lo que escucháis, eso es compartir, y si sois un poco pesados mucho mejor.

Y voy al lío. Billy Tipton fue un músico y director de orquesta con cierto prestigio en los años 40 y 50. Billy Tipton se sentía hombre pero nació mujer, y ocultó esta condición toda su vida. Entre otras cosas un hombre lo tenía mucho mejor para desarrollar una carrera en aquel mundo tan lamentablemente machista del jazz. Solamente cuando fue hospitalizado antes de morir se descubrió que era mujer, circunstancia que no conocía ni su mujer actual ni las cuatro anteriores. (https://abcblogs.abc.es/silencio-por-favor/otros-temas/billy-tipton.html?ref=http%3A%2F%2Fwww.jazzitis.com%2Farticulos%2Fla-mujer-jazz-siglo-xxi%2F)

Cuando el asunto salió en la prensa cuatro mujeres montaron un cuarteto y le pusieron el nombre de The Tiptons Sax Quartet en homenaje a Billy Tipton (o Dorothy Lucille Tipton, su nombre de nacimiento). El disfrutable disco que he estado escuchando lo publicó, como otros de este cuarteto, el sello propiedad de la compositora y saxofonista Jessica Lurie, líder de The Tiptons Sax Quartet y muy conocida en los ambientes alternativos de NYC. Su discografía es muy interesante. Entre otras cosas hace un par de años participó en un disco con un grupo formado por John Zorn, y ha grabado con gente como Bill Frisell, Nels Cline, Allison Miller, Eyvind Kang, Wayne Horvitz, etc.

El disco es muy disfrutable. Al cuarteto de saxos se añade un baterista. En algún track se respira ese aire cachondo de las bandas de metales balcánicas, hay otro que es una tarantella napolitana en versión del siglo XXI, también hay sitio para una breve y bonita canción de voces a capella, en fin… un disco variado de tono actual de cuarteto de saxos que transita por otros caminos que los del extraordinario World Saxophone Quartet o los del Rova Saxophone Quartet.



The Tiptons Sax Quartet & Drums “Laws Of Motion” (Zipa! Music, 2008)
Jessica Lurie (saxo alto, saxo tenor, voz); Amy Denio (saxo alto, clarinete, voz); Tina Richerson (saxo barítono, voz); Sue Orfield (saxo tenor, voz); Chris Stromquist (batería).

Se puede escuchar en Bandcamp https://tiptonssaxquartet.bandcamp.com/album/laws-of-motion, pero si te da pereza ir a otra página aquí un par de muestras. La primera es un bello tema de aire folkie, la segunda con ese tono festivo balcánico al que me refería antes:

“Anthem”


“Yugo A Go Go”

Si un músico no tiene nada nuevo que decir cuando hace su música, es un fraude. De esos hay muchos, además algunos se ganan muy bien la vida, no quiero saber cuanta pasta ha acumulado por ejemplo Kenny G haciendo sus guarradas. Pero este no es el caso de Tomeka Reid, cellista, compositora y enseñante que ahora vive en NYC después de años en la escena avanzada de la música improvisada de Chicago. Durante sus años en Chicago ha estado intensamente comprometida con la movida de la AACM (Association for the Advancement of Creative Musicians).

Tomeka Reid está con Art Ensemble of Chicago, con el Black Earth Ensemble de Nicole Mitchell, con la impresionante gran banda Third Coast Ensemble de Rob Mazurek que grabó el muy recomendable “Wrecks” en el sello RogueArt… además de liderar su propio trio y cuarteto (más información en su web). Precisamente el año pasado el cuarteto publicó su segundo disco, uno de los discos del año más alabados por la crítica especializada y que más han sonado en casa estos últimos meses, el “Old New”, bastante apto para casi todas las orejas, las que estén abiertas, claro.

Además de Tomeka Reid con su cello tocado con arco y pizzicatto, en su trio de cuerdas con batería participa Mary Halvorson, una guitarrista que ha roto esquemas y que desde hace diez años encabeza las listas de mejor guitarrista de jazz. El papel de la Halvorson en este disco es notable, con su personalísimo estilo distinguible al primer compás, el uso que hace de los pedales la hace inconfundible, su fascinante inestabilidad armónica es marca de la casa, a veces ácida y corrosiva y a veces delicadamente puntillista. El cuarteto lo completan el multi-instrumentista Jason Roebke (en este disco como contrabajista) y el cada vez más encumbrado baterista Tomas Fujiwara. Un cuarteto de lujo.

El primer track del disco:



Tomeka Reid Quartet “Old New” (Cuneiform Records, 2019)
Tomeka Reid (cello); Mary Halvorson (guitarra); Jason Roebke (contrabajo); Tomas Fujiwara (batería).

Hola Tocho, enhorabuena por este hilo que empieza fuerte y promete muy bien…

El jazz con una buena historia sabe mucho mejor, no hay dudas. No conocía la historia de Tipton, es increíble y me pone los pelos de punta. Que infierno tiene que haber vivido esta mujer atrapada en una situación sin salida. También he ido escuchando alguna pieza de Jessica Lurie que no conocía...

El disco de Tomeka Reid pasa a mi lista de escucha, tiene buena pinta gracias.

Me atrevo a sugerir un disco, aunque no tenga una historia tan especial.

Es del bajista Mario Pavone: “Deeze to blues”, Playscape recordings, 2006.

Además, cuenta con: Steven Bernstein trompeta, Howard Johnson: tuba, sax baritone, clarinete bajo, Charles Burnham violín; Peter Madsen piano; Michael Sarin batería.



Spotify: https://open.spotify.com/album/6IKwGKv1ouXGyXfEKDXLf8]https://open.spotify.com/album/6IKwGKv1ouXGyXfEKDXLf8

Mario Pavone es un bajista americano de estilo bastante free que toca desde los ´60 con grandes músicos como A. Braxton, P. Bley, A. Shepp y recientemente C. Taborn, D. Douglas y muchos más.

Nada más escucharle me duelen las manos… debe tener uno dedos de hierro, toca con mucha fuerza de manera casi brusca y con un tono no muy limpio y definido, a veces me recuerda un poco Mingus. Me imagino su bajo con unas cuerdas al punto saltar…

Le conocía muy por encima, pero me pondré a un régimen estricto de Pavone porque este disco me encantó.   Reúne una faceta más instintiva, física (el blues, el ritmo) con una más cerebral (la abstracción y disonancias de las múltiples líneas melódicas).

Esto es exactamente lo que busco en el jazz, no es tan fácil encontrar sobre todo en el jazz más actual que a menudo no consigue emocionarme.
Como plus el sexteto incorpora algunos instrumentos menos habituales y con mucho "cuerpo". Para mi gusto un disco estrella.

¡Ostras, qué alegría, otro pesao! He corregido el título “El rincón de un pesao” a “El rincón de los pesaos” porque veo contento que no soy el único. A ver si hay algún otro pesao por ahí escondido.

Muy bueno el Mario Pavone, y un discazo este “Deez To Blues”. La corpulencia del contrabajo de Pavone me pone cantidad. Tiene una buena cantidad de discos, alguno más impenetrable que otros.

Hace poco, buscando discos de la inigualable Annette Peacock (primera mujer de Gary Peacock, y después compañera de Paul Bley), me di de morros con una cosa de la Peacock con Bley, grabada en dos directos europeos en 1971. Paul Bley andaba esos años experimentando con el sintetizador (un Minimoog), al contrabajo está Mario Pavone que en esta época estaba en el trío del añorado pianista, y… no te lo pierdas… ¡nuestro querido Han Bennink en la batería! ¡1971! ¡hace casi 50 años!

De la hija de Mario Pavone hablaremos en otro momento, porque también se las trae.

Por aquello de las casualidades: hace poco escuchaba el “Seven Standards” que grabó Anthony Braxton en quinteto y se publicó en 1995, uno de esos discos en los que el maestro Braxton decide hacer versiones de standards ¡pero esta vez al piano! Al piano Braxton es bastante bruto, pero funciona. En este quinteto le acompañan las bestias Thomas Chapin, Dave Douglas, Pheroan AkLaaf, además de Mario Pavone, el cual toca walking bass al más puro estilo Charles Mingus.

Pero más recomendables para escuchar el contrabajo bien grabado y con esa contundente y espectacular presencia carnosa, me encanta por ejemplo el “Boom” en formato de cuarteto, o de la misma época el “Orange” la mitad de los temas en trio y la otra mitad en quinteto.

Del “Boom”, el tema “Arkadia”:



Mario Pavone “Boom” (Playscape, 2004)
Mario Pavone (contrabajo); Tony Malaby (saxo tenor y saxo soprano); Peter Madsen (piano); Matt Wilson (batería)


Del “Orange” en trío, “Triple Diamond”:




Del “Orange” en quinteto, “Bleu Rex”:



Mario Pavone Nu Trio/Quintet “Orange” (Playscape, 2003)
Mario Pavone (contrabajo); Tony Malaby (saxo tenor y saxo soprano); Steven Bernstein (trompeta de varas); Peter Madsen (piano); Gerald Cleaver (batería)

Buenos días.
Tocho, enhorabuena por tu nuevo hilo que va camino de convertirse en una enciclopedia
Es broma. Muy interesante, didáctico y ameno a la vez.

Sumiko escribió:Buenos días.
Tocho, enhorabuena por tu nuevo hilo que va camino de convertirse en una enciclopedia
Es broma. Muy interesante, didáctico y ameno a la vez.

Muchas gracias, Sumiko. Venga, anímate, todos tenemos un pesao en nuestro interior, me encantarían tus aportaciones.
Más que una enciclopedia esto se puede convertir en la anti-enciclopedia, porque las enciclopedias pretenden ser ordenadas, frías y objetivas, y este hilo tiene la pinta de ser subjetivo y caliente, además de compartir información poco ordenada que igual no está en las enciclopedias.

Este post va de uno de los grandes del jazz actual: Henry Threadgill.

Henry Threadgill es saxofonista, flautista, compositor y líder de banda, vinculado a la AACM de Chicago desde su fundación y considerado uno de los compositores más influyentes de las últimas décadas. Tuve un subidón de alegría cuando hace tres o cuatro años le concedieron el Premio Pulitzer de Música.

Su primer proyecto estable fue un trío, al que le puso el nombre de Air, con dos colegas de Chicago: el contrabajista Fred Hopkins y el baterista Steve McCall, los dos ya fallecidos. Momento Ana Rosa: Threadgill y Cassandra Wilson fueron marido y mujer, y ella participó en alguno de los discos de Air. Threadgill tiene actualmente 75 años, y continúa grabando con relativa regularidad discos soberbios sin concesiones a la galería.

A mediados de los 70 el free jazz empezaba a dar síntomas de haber cumplido su ciclo vital, simultáneamente se crearon espacios alternativos por iniciativa de los propios artistas, o de activistas culturales, donde los nuevos artistas de diferentes disciplinas pudieran mostrar su obra a un nuevo público con total libertad, sin el condicionamiento natural de los propietarios de las salas convencionales. Esos espacios eran los lofts, acostumbraban a ser almacenes abandonados, y el más activo en NYC fue el Studio Rivbea, de Sam Rivers. Con los lofts nació una nueva cultura de la relación artista-público, y en esos locales se empezó a experimentar un nuevo jazz, heredero directo del free. En este contexto nació Air.

En 1979 Threadgill con su trío Air grabó un disco titulado “Air Lore”, con versiones iconoclastas y generoso sentido del humor de composiciones del pionero del jazz Jelly Roll Morton y del máximo exponente del ragtime Scott Joplin. Esta revisión de materiales pretéritos por supuesto no es revivalista, en manos del trío estas añejas composiciones son absolutamente reconocibles pero con algún punto delirante. Hacer una cosa así en el ambiente underground, que era el hábitat natural de Air, era ir a contracorriente, pero Threadgill y sus dos colegas no se cortaron un pelo. El color sepia de la foto de la portada y el escenario decimonónico es toda una declaración de intenciones.

Por otro lado es un ejemplo más de las profundas raíces del jazz contemporáneo en la tradición secular, porque ni mucho menos es una burla sino que es producto de la admiración sincera hacia los pioneros de los orígenes del jazz, según ha explicado Threadgill alguna vez. Hoy el disco es un referente clásico de la música que se hacía en aquella época de los lofts de los años 70 y primera mitad de los 80, y no ha perdido ni un ápice de su vigencia y frescura.

Una de las composiciones de Scott Joplin que se incluyen en el disco es “The Ragtime Dance”. Este tipo de rag se utilizaba como introducción en los espectáculos de los minstrels, por eso ese aire cirquense con el que Threadgill trata el tema y que que es una muestra del profundo conocimiento que tiene de la historia de la música popular afroamericana. Los espectáculos itinerantes de los minstrels fueron extraordinariamente populares desde 1830 hasta principios del siglo XX, y fue la primera muestra de la música popular de EEUU liberada de la influencia de la música europea. Threadgill tiene mucha querencia al sonido de la música de las antiguas orquestas de circo, no en vano uno de sus grupos más recomendables de principio de los 90 se llamó Very Very Circus.

Pues esta es la versión de Air del clásico “The Ragtime Dance”:



Y esto es “Buddy Bolden’s Blues” compuesto por el que se autodefinía sin un gramo de modestia como el inventor del jazz, Jelly Roll Morton, el cual a su vez se basó en sus recuerdos del “Funky Butt” del legendario Buddy Bolden, al que muchos historiadores consideran el primer músico de jazz, y que se sepa no dejó nada grabado:



Air “Air Lore” (Arista/Novus, 1979)
Henri Threadgill (saxo alto, saxo tenor y flauta); Fred Hopkins (contrabajo); Steve McCall (batería).
Temas: The Ragtime Dance; Buddy Bolden’s Blues; King Porter Stomp; Paille Street; Weeping Willow Rag.

Tocho escribió:



Tomeka Reid Quartet “Old New” (Cuneiform Records, 2019)
Tomeka Reid (cello); Mary Halvorson (guitarra); Jason Roebke (contrabajo); Tomas Fujiwara (batería).

Al principio no conseguí conectar con este disco: los riffs casi de prog rock de las primeras piezas y la sección rítmica muy intensa no me convencieron (nota aparte: por qué tantos discos de jazz “de hoy” tienen una sección bajo-batería tan potente? Me cansan...)
Me alegro de haber intentado una segunda escucha, lo que me ha permitido disfrutar bastante y alargar mis horizontes musicales. Seguiré Tomeka Reid en otros discos… y también reconozco que Halvorson es una guitarrista original. An acquired taste dirían los ingleses, en fin, como un whisky ahumado, primero lo sufres un poco y luego te conquista.
Sigo con Pavone y he añadido a la lista tan buena del compañero Tocho un trio con Paul Bley (“Trio Arc”).

Hoy he estado escuchando un disco de música de New Orleans, a nombre de Irvin Mayfield. Este destacadísimo trompetista fundó la New Orleans Jazz Orchestra (NOJO) al abrigo de la New Orleans Library, una institución parecida al Lincoln Center cuya división de jazz dirige Wynton Marsalis, solo que la NOJO está financiada con dinero público.

Todo iba bien, incluso Mayfield fue nombrado Embajador Cultural de la Ciudad de Nueva Orleans mientras dirigía con éxito la orquesta que representaba a la ciudad, hasta que una investigación puso al descubierto que Mayfield había estado haciendo un uso incorrecto de la pasta, y no era una tontería, la cosa iba de un desvío de casi un millón y medio de dólares. Un escándalo. El juicio por fraude, conspiración y lavado de dinero (entre los 20 cargos de que se le acusa) todavía no se ha celebrado, pero le pueden caer 20 años y no pinta muy bien.

Antes del escándalo Irvin Mayfield publicó un disco en 2011 de homenaje a su ciudad, con la colaboración de eminentes músicos de Nueva Orleans, entre ellos Ellis Marsalis y su hijo Wynton, la calentorra Rebirth Brass Band, el divertido trompetista Kermitt Ruffins, la Orquesta Filarmónica de Louisiana, el saxofonista Donald Harrison Jr, etc. El disco se tituló “A Love Letter to New Orleans” (Carta de amor a Nueva Orleans), y no hace falta decir que suena a Nueva Orleans de principio a fin, mestizaje al poder. La paradoja es que mientras estaba grabando este disco Irvin Mayfield ya empezaba a expoliar el dinero público de sus conciudadanos. ¡Vaya carta de amor!

Aquí el último track del disco, fiesta de Mardi Gras pal cuerpo. En este tema participan Los Hombres Calientes, la Rebirth Brass Band, Kermitt Ruffins, Trombone Shorty… todos ellos nombres ilustres de la música de la ciudad. No sé la cara que se les debió poner cuando se enteraron de los tejemanejes de Irvin Mayfield.

Tocho escribió:Hoy he estado escuchando un disco de música de New Orleans, a nombre de Irvin Mayfield. Este destacadísimo trompetista fundó la New Orleans Jazz Orchestra (NOJO) al abrigo de la New Orleans Library, una institución parecida al Lincoln Center cuya división de jazz dirige Wynton Marsalis, solo que la NOJO está financiada con dinero público.

Todo iba bien, incluso Mayfield fue nombrado Embajador Cultural de la Ciudad de Nueva Orleans mientras dirigía con éxito la orquesta que representaba a la ciudad, hasta que una investigación puso al descubierto que Mayfield había estado haciendo un uso incorrecto de la pasta, y no era una tontería, la cosa iba de un desvío de casi un millón y medio de dólares. Un escándalo. El juicio por fraude, conspiración y lavado de dinero (entre los 20 cargos de que se le acusa) todavía no se ha celebrado, pero le pueden caer 20 años y no pinta muy bien.

Antes del escándalo Irvin Mayfield publicó un disco en 2011 de homenaje a su ciudad, con la colaboración de eminentes músicos de Nueva Orleans, entre ellos Ellis Marsalis y su hijo Wynton, la calentorra Rebirth Brass Band, el divertido trompetista Kermitt Ruffins, la Orquesta Filarmónica de Louisiana, el saxofonista Donald Harrison Jr, etc. El disco se tituló “A Love Letter to New Orleans” (Carta de amor a Nueva Orleans), y no hace falta decir que suena a Nueva Orleans de principio a fin, mestizaje al poder. La paradoja es que mientras estaba grabando este disco Irvin Mayfield ya empezaba a expoliar el dinero público de sus conciudadanos. ¡Vaya carta de amor!

Aquí el último track del disco, fiesta de Mardi Gras pal cuerpo. En este tema participan Los Hombres Calientes, la Rebirth Brass Band, Kermitt Ruffins, Trombone Shorty… todos ellos nombres ilustres de la música de la ciudad. No sé la cara que se les debió poner cuando se enteraron de los tejemanejes de Irvin Mayfield.

Gracias Tocho, buen disco. Para conocer la cultura contemporánea de New Orleans recomiendo la serie HBO “Treme” que cuenta la historia de la ciudad después del huracán Cathrina. Hay mucha música y cameos de varios músicos locales, incluido el mismísimo Dr. John...

BPED escribió:(...) Para conocer la cultura contemporánea de New Orleans recomiendo la serie HBO “Treme” que cuenta la historia de la ciudad después del huracán Cathrina. Hay mucha música y cameos de varios músicos locales, incluido el mismísimo Dr. John...

Magnífica serie. Coincido contigo en recomendarla, sobre todo las dos primeras temporadas, luego ya decae, en mi opinión.

Esta serie de ficción es un gustazo para un amante del jazz con curiosidad por saber como funciona la cosa de Nueva Orleans después del desastre del Katrina, con todo ese mestizaje de culturas y tradiciones musicales que pivotan alrededor del jazz. Una música de personalidad única que solamente puede producirse en una ciudad con la historia y la tradición de Nueva Orleans, un universo en sí misma y verdadera protagonista de la serie, aunque también cuenta con unos cuantos personajes de carisma irresistible.

Hay decenas de cameos, un juego divertido es contar a cuantos pillas, es la serie con más músicos por centímetro cuadrado que se ha producido jamás.

Tocho escribió:

BPED escribió:(...) Para conocer la cultura contemporánea de New Orleans recomiendo la serie HBO “Treme” que cuenta la historia de la ciudad después del huracán Cathrina. Hay mucha música y cameos de varios músicos locales, incluido el mismísimo Dr. John...

Magnífica serie. Coincido contigo en recomendarla, sobre todo las dos primeras temporadas, luego ya decae, en mi opinión.

Esta serie de ficción es un gustazo para un amante del jazz con curiosidad por saber como funciona la cosa de Nueva Orleans después del desastre del Katrina, con todo ese mestizaje de culturas y tradiciones musicales que pivotan alrededor del jazz. Una música de personalidad única que solamente puede producirse en una ciudad con la historia y la tradición de Nueva Orleans, un universo en sí misma y verdadera protagonista de la serie, aunque también cuenta con unos cuantos personajes de carisma irresistible.

Hay decenas de cameos, un juego divertido es contar a cuantos pillas, es la serie con más músicos por centímetro cuadrado que se ha producido jamás.

Una de las mas grandes

Ya que estamos en Nueva Orleans es obligado mencionar a uno de los más grandes, influyentes y más queridos músicos de la ciudad de estas últimas décadas: Allen Toussaint.

A Allen Toussaint la muerte le pilló de gira, en Madrid, después de un concierto a finales de 2015. Fue productor de decenas de artistas a los que ayudó en sus carreras, autor de un montón de canciones de éxito, arreglista musical, cantante y pianista heredero de la mejor tradición de Nueva Orleans, principal impulsor del r&b, soul y funk sureño en los 60, propietario de su propio sello después de haber sido Director Artístico de otros… Si tenéis curiosidad por esta leyenda de la música de Nueva Orleans aquí hay más información.

Las inundaciones del huracán Katrina destruyeron su casa y sus estudios de grabación, y Toussaint se mudó un tiempo a Nueva York. Poco antes de volver a su amado Nueva Orleans grabó un disco en NYC que es una joya imperdible, el “The Bright Mississippi”, producido por el gran Joe Henry y publicado en 2009, con Tousssaint al piano y unos colaboradores estelares: Marc Ribot, Don Byron, Nicholas Payton, Joshua Redman en un tema, Brad Mehldau en otro…

Todos los temas del disco son buenísimos, pero por poner alguno ahí va el “West End Blues”, con la entrada de Nicholas Payton homenajeando a Louis Armstrong y su histórica introducción:



Y el tema que da título al disco, la composición del genial Thelonious Monk “The Bright Mississippi” en clave más nuevaorleanera imposible, con Allen Toussaint tomando el testigo del piano que nos dejó el enorme Professor Longhair, y Byron y Payton respirando Nueva Orleans por los cuatro costados:



Allen Toussaint “The Bright Mississippi” (Nonesuch Records, 2009)
Allen Toussaint (piano y voz); Marc Ribot (guitarra); Don Byron (clarinete); Nicholas Payton (trompeta); Jay Bellerose (batería y percusión); Brad Mehldau (piano); Joshua Redman (saxo tenor).

Y no puedo resistirme pegar un YouTube del funeral de Allen Toussaint. Ahí están Trombone Shorty, Kermit Ruffins, la Preservation Hall Brass Band, Jon Cleary, Dr. John, Aaron Neville, John Boutté…

Tocho escribió:

Y no puedo resistirme pegar un YouTube del funeral de Allen Toussaint. Ahí están Trombone Shorty, Kermit Ruffins, la Preservation Hall Brass Band, Jon Cleary, Dr. John, Aaron Neville, John Boutté…

Esa es la forma que me gusta de despedir a un amigo, desde el respeto a su muerte y la celebración de su vida, siempre me han impresionado los funerales de Nueva Orleans.

Saludos

Todas estas referencias a Allen Toissaint me traen a la mente un proyecto de Kip Hanrahan llamedo Conjure, que he recordado estos días. Publicaron tres discos con variación de músicos y en las dos primeras entregas está Toissaint. Una verdadera amalgama de Funk, Jazz, ritmos latinos, Soul...utilizando como amalgama los poemas de Ishmael Reed. Los resultados son tan variados como los distintos temas de los tres discos. Están publicados en el sello de Hanrahan American Clave. Dave Murray, Taj Mahal, Don Pullen, Bobby Womack, Steve Swallow, Leo Nocentelli, Jack Bruce...y me dejo un montón. Un tema del primer disco...

Ostras, coltrein, no pensaba que un músico tan inclasificable y singular como Hanrahan fuera mencionado en este foro. Me has alegrado el día.

Siempre he alucinado con la impresionante capacidad de este tío para convocar en un estudio de grabación a músicos tan extraordinarios, y de ecosistemas tan diversos, para poner en solfa sus estupendos proyectos personales, libres de cualquier prejuicio y absolutamente independientes.

También es muy destacada la faceta de Kip Hanrahan como productor e ingeniero, dos de mis varios discos preferidos de la extensa discografía de Astor Piazzolla fueron producidos por Hanrahan: el “Nuevo Tango: Hora Zero”, del cual Piazzolla afirmaba que era el mejor disco de su vida, y otro al año siguiente que a mí me gusta mucho más, el “The Rough Dancer and the Cyclical Night (Tango Apasionado)” por el que tengo una especial debilidad. Lo de "Tango Apasionado" del título no es nada gratuito.

Una muestra del “Nuevo Tango: Hora Zero”:



Astor Piazzolla “Nuevo Tango: Hora Zero” (Nonesuch/American Clavé, 1986)
Astor Piazzolla (bandoneón); Pablo Ziegler (piano); Héctor Console (contrabajo); Horacio Malvicino (guitarra); Fernando Suárez Paz (violín).


Una muestra del “The Rough Dancer and the Cyclical Night (Tango Apasionado)”:



Astor Piazzolla “The Rough Dancer and the Cyclical Night (Tango Apasionado)” (Nonesuch/American Clavé, 1987)
Astor Piazzolla (bandoneón); Andy González (contrabajo); Paquito D’Rivera (clarinete y saxo); Rodolfo Alchourrón (guitarra); Pablo Zinger (piano); Fernando Suárez Paz (violín).

Es que éramos unha pandilla de frikis en los 80-90, Tocho . Y hablando de frikis...La Italian Instabile Orchestra surge en 1990 como un intento de unificar los distintos panoramas del Jazz en Italia, así como a una buena representación de sus músicos...y no le ha ido nada mal. Gente de varias generaciones del jazz italiano que intentan funcionar como una suerte de embajadores del mismo. Han tocado además con gente como Cecil Taylor, Lester Bowie o Anthony Braxton.

Alberto Mandarini, Bruno Tommaso, Carlo Actis Dato, Daniele Cavallanti, Eugenio Colombo, Giancarlo Schiaffini, Gianluigi Trovesi, Giorgio Gaslini, Giovanni Maier, Guido Mazzon, Mario Schiano, Martin Mayes, Paolo Damiani, Pino Minafra, Sebi Tramontana, Tiziano Tononi, Umberto Petrin, y Vincenzo Mazzone ha sido su formación habitual, si bien ha habido algún cambio a lo largo de su existencia (el mismo Enrico Rava, por ejemplo), aunque pocos.

Una mezcla de respeto por los maestros, free jazz, música tradicional y culta italiana y sin dejar de tener un toque de humor. Espero que disfrutéis.

Jejejeje… me temo que los que fuimos frikis en los 80 continuamos siéndolo ahora.

Pues sí, una disfrutada, fantástico concierto, momentos emocionantes. ¡Qué buena la versión del St. James Infirmary y espectacular la impro de Trovesi! Gracias, coltrein. El último tema suena totalmente a Sudáfrica ¿se sabe si es algo de Abdullah Ibrahim?

Pues la verdad es que no lo sé. Tengo algún cd de Ibrahim, pero no lo controlo demasiado. De todas formas no me extrañaría que fuese algún tema tradicional (o quizá composición de algún miembro). Carlo Actis Dato, por ejemplo, incluye composiciones en sus discos que te hacen viajar por muchos lugares del mundo, y África es uno de ellos. Gran saxo barítono y clarinetista, por cierto. Un ejemplo:

Hablando de orquestas frikis, quizás la más friki de la historia pudiera ser la Arkestra de Sun Ra. La discografía de Sun Ra es imposible de controlar, muchas de sus grabaciones las publicó originalmente en ediciones caseras con portadas hechas a mano y en un número muy limitado de copias que vendía en sus conciertos, a veces con títulos diferentes o directamente sin título ni información de dónde ni cuándo fueron grabados, con lo que su discografía tiende al caos. Tiene cosas buenísimas, desde swing a experimentación radical. Su influencia en el desarrollo del jazz rompiendo moldes a lo bestia fue tremenda. A mí me cae muy bien el tipo y tengo bastantes cosas suyas, pero no llego al grado de fanatismo de alguno de mis amigos.

Aquí un concierto de 1983 de Sun Ra con su Arkestra (los alérgicos al free jazz ya podéis salir corriendo). En realidad es una Arkestra muy atípica, porque ahí están Don Cherry, Lester Bowie, Archie Shepp, Famoudou Don Moye y Philly Joe Jones, no pertenecientes a la habitual Arkestra. Si vais justitos de tiempo aconsejo el blues que empieza en el minuto 28:55 y la larga versión del conocido “Poinciana” que viene a continuación, cerrando el vídeo.



Sun Ra (teclado); Don Cherry (trompeta de bolsillo y voz); Lester Bowie (trompeta); Marshall Allen (saxo alto); John Gilmore (saxo tenor); Archie Shepp (saxo tenor y voz); Richard Davis (contrabajo); Clifford Jarvis (batería); Philly Joe Jones (batería); Famoudou Don Moye (batería y percusiones).

Una muy mala noticia, nos ha dejado el gran McCoy Tyner.

https://elpais.com/cultura/2020-03-06/muere-el-pianista-mccoy-tyner-miembro-del-cuarteto-de-coltrane.html

Genial hilo, muy curiosa la historia de la primera protagonista, lo iré estudiando cuando encuentre un hueco, promete.

GRACIAS.

muchas gracias por este gran hilo....seguire atento

Gracias a todos por este hilo, tendré que cogerme vacaciones para explorar todas las pistas apasionantes que se mencionan aquí…

Por mi parte, después de un régimen estricto a base de Pavone he pasado algunas buenas horas en compañía de Monk, o mejor escuchando interpretaciones de su música.
Os propongo dos discos.

El primero es del pianista alemán Alexander von Schlippenbach, conocido sobre todo por sus discos free de los ´70. Casado con otro personaje singular, la pianista Aki Takase - también recomendable, von Schlippenbach en los últimos años ha grabado versiones de grandes del pasado como Eric Dolphy y Monk.

En “Monk’s casino” (Intakt, 2003) le acompañan Rudi Mahall (clarinete bajo), Alexander Dorner (trompeta), Jan Roder (bajo) y Uli Jennessen (batería). La instrumentación quizás no sea típica de la música de Monk pero el espíritu que permea el disco es sin duda Monkiano: irreverente, irónico, libre.
von Schlippenbach decidió grabar todo el repertorio de Monk en tres discos, reservándose un papel relativamente menor y dando más espacio a Mahall y Dorner, lo que dice mucho de este hombre poco convencional.
El disco es live y hay de todo, piezas despachadas en menos de un minuto, barridos free, swing, repertorio oscuro de Monk y clásicos. Obra bastante desigual pero muy recomendable en el conjunto y  con muchas sorpresas.

https://open.spotify.com/album/6awGQ17Mhke7OHu5N5vQjS



El segundo intérprete que os propongo es el pianista canadiense John Stech, originariamente Stechishin, de familia ucraniana. En mi opinión merecería más visibilidad por sus optimos discos. “Esponetially Monk" (Justin times records, 2004) es un disco para disfrutar, cuya característica dominante es el virtuosismo de Stech. Entre free y lirico, Stech nunca es disonante y me asombra por su dominio absoluto del piano. Un disco al cual me gusta volver de vez en cuando…



https://open.spotify.com/album/4pic1cjK0CRIcrfF9tLVw8

BPED escribió:(...)

Por mi parte, después de un régimen estricto a base de Pavone he pasado algunas buenas horas en compañía de Monk, o mejor escuchando interpretaciones de su música.
Os propongo dos discos.

El primero es del pianista alemán Alexander von Schlippenbach, conocido sobre todo por sus discos free de los ´70. Casado con otro personaje singular, la pianista Aki Takase - también recomendable, von Schlippenbach en los últimos años ha grabado versiones de grandes del pasado como Eric Dolphy y Monk.

En “Monk’s casino” (Intakt, 2003) le acompañan Rudi Mahall (clarinete bajo), Alexander Dorner (trompeta), Jan Roder (bajo) y Uli Jennessen (batería). La instrumentación quizás no sea típica de la música de Monk pero el espíritu que permea el disco es sin duda Monkiano: irreverente, irónico, libre.
von Schlippenbach decidió grabar todo el repertorio de Monk en tres discos, reservándose un papel relativamente menor y dando más espacio a Mahall y Dorner, lo que dice mucho de este hombre poco convencional.
El disco es live y hay de todo, piezas despachadas en menos de un minuto, barridos free, swing, repertorio oscuro de Monk y clásicos. Obra bastante desigual pero muy recomendable en el conjunto y  con muchas sorpresas.

https://open.spotify.com/album/6awGQ17Mhke7OHu5N5vQjS


El segundo intérprete que os propongo es el pianista canadiense John Stech, originariamente Stechishin, de familia ucraniana. En mi opinión merecería más visibilidad por sus optimos discos. “Esponetially Monk" (Justin times records, 2004) es un disco para disfrutar, cuya característica dominante es el virtuosismo de Stech. Entre free y lirico, Stech nunca es disonante y me asombra por su dominio absoluto del piano. Un disco al cual me gusta volver de vez en cuando…

https://open.spotify.com/album/4pic1cjK0CRIcrfF9tLVw8

Para mi gusto los otros dos discos de Schlippenbach dedicados a Monk me parecen bastante mejores que el triple “Monk’s Casino”, del cual dices que es un poco irregular, con lo que estoy plenamente de acuerdo. Tiene cosas muy divertidas, pero para mí (siempre esa bendita subjetividad) es demasiado “concestual”, y por qué no decirlo, incluso un poco superficial, y sus compañeros de grabación no levantan demasiado la cosa.

El de John Stetch no lo había escuchado, su personal manera de abordar a Monk me ha gustado mucho, nada que ver con lo de Schlippenbach en “Monk’s Casino”, gracias BPED. Veo que John Stetch tiene más discos, habrá que darle una ojeada, ¿recomiendas alguno?