Anecdota sobre Neville Marriner

Hola a Todos.

Ayer estuve viendo a Sir Neville Marriner dirigiendo la OCNE en el auditorio nacional.

El programa constaba de una sinfonía de Haydn, el concierto para chelo y orquesta y las variaciones Enigma, ambos de Edgar. Aunque se le veia mayorzote, dirigió la orquesta con solvencia y la verdad, esta sonó muy bien. Pero cada vez que Bajaba del podio, con cierta torpeza, temía que se cayese y se nos rompiera una cadera allí mismito.

Cuando terminó, como ya supondréis, empezó el consabido ritual de los aplausos.
La gente ansiosa por mostrarle su afecto y reconocimiento, y el pobre hombre deseoso de irse a descansar.
Saludó, mandó levantar la orquesta, dio la mano al primer violin. Así dos veces.

La tercera salió, subió a podio, volvió a agradecer los aplausos e hizo un gesto con ambas manos como diciendo; " muchas gracias pero parar ya". Como aquello no paraba, mando levantar la orquesta, le dio la mano al primer violinista, pero esta vez, no solo no se la soltó, sino que con la otra le agarró del hombro, le dio la vuelta y a empujoncitos y con gestos de " hala, hala, tira" se marcharon entre las sonrisas de la orquesta que los siguió.

Sé que ya tiene sus añitos, pero no sabìa cuantos exactamente, así que lo busque en  wikipedia.

El señor Neville Marriner cumplirá el proximo 15 de Abril...  

¡¡ 91 Años !!

Saludos

Sí, hoy lo han comentado en la radio. A pesar de su edad aún dirige por esos mundos de Dios

Es mayor su entusiasmo que su resistencia, sin ninguna duda. Pero es obvio que no tiene intención alguna de retirarse. Esperemos que las circunstancias no le retiren forzosamente.

Saludos.

Para mí, que con eso de ser Sir, y de fundar y dirigir la Academy of St. Martin in the Fields ( que es la parroquia de la Queen ) se le ha pegado algo de la Royal Family y va a durar más que el culo de un mortero.

Hombre pues de resistencia tampoco anda nada mal, si tenemos en cuenta que dirigió el mismo concierto; viernes, sábado y domingo.
Con esa edad es asombroso.

Un ejemplo de longevidad. A ver hasta dónde llega ...