Ver, probar, hacer, comprar. Restaurante Viru, Madrid.

Ver, probar, hacer, comprar.

Bueno, abro una línea (me olvidare de seguirla, seguro), que bajo el título de “Ver, probar, hacer, comprar”, y sus apellidos correspondientes, trata de comentar brevemente actividades de ocio. Como: lugares a ver (todo tipo de sitios que se deben de ver en una ciudad, desde jardines a casas, etc. viajes enteros incluidos); cosas que se pueden hacer para ocupar el ocio (desde un curso a una actividad de otro tipo); sitios donde comer, cenar, tapear, o degustar un buen vino; y tiendas interesantes para completar estas actividades (tiendas de museos, de delicatesen, vinotecas, librerías, etc. etc.). Sé que hay muchos sitios de este estilo, pero este no pretende hacer publicidad (más o menos sincera) a nadie. En mi caso espero que sean notas cortas, y prácticas.

Nota: Todo esto excepto música, cine, teatro, y otras actividades puramente culturales, que ya tiene su lugar en “cultura” (aunque será dificil no invadir espacios, seguro).

Si alguien se anima y continua con el titular, solo tiene que pegar a este título el apellido correspondiente (tipo de actividad + nombre. Y la ciudad). De este modo será fácil ordenarlas y recuperarlas o agruparlas a futuro.

Por ejemplo: Ver, probar, hacer, comprar. Restaurante Viru, Madrid.

Pues lo dicho. “Viru” es un restaurante de alta comida peruana sito en la calle Claudio Coello de Madrid. No pretende ser Astrid & Gastón, o eso creo yo (esta a mucha distancia), pero tampoco pretende ser Tantra (aunque no esta tan lejos culinariamente). Lo que más me ha llamado la atención de este restaurante es la calidad del servicio, algo que aprecio mucho y que se ha perdido en muchos lugares. Esta es más protocolaria que profesional, pero está por encima de la mayoría. Lo segundo que he apreciado es el local, muy agradable, bien distribuido, bien iluminado y climatizado, con correctos baños, y con mesas grandes y separadas. Tampoco es muy ruidoso. Todo muy grato e inusual.

La comida de Viru es correcta, me esperaba más. Por citar algunas cosas; Pulpo a la brasa agradable, aunque por la mitad de precio se come de manera similar y más sabrosa en algunas calles de muchas ciudades del norte, ceviche regular, aji de gallina muy jugoso, helado cremoso estupendo, y suspiros (especialmente el de dulce de leche) demasiado empalagoso y sin conseguir mucho más de lo que se puede hacer con un bote y una cuchara. Muy buen aperitivo y fantásticos panes. Aconsejable la relación calidad precio del menú corto. A la carta 40-45 pp sin vino.

En resumidas cuentas, no acabo de ver el recorrido de las cartas de la mayoría de los peruanos que están proliferando sin cesar en las grandes ciudades, ni la imaginación (por su falta) de muchos de ellos. Siempre me quedo con dos ideas; esperaba más y no volver hasta que pasen muchos meses. Viru pretende no ser uno más, y no lo es en casi todo, excepto en la cocina, que tiene que diferenciarse más y mejorar.

Sigue siendo mucho dinero para este tipo de apuestas que son fácilmente comparables con otras menos pretenciosas y más asequibles, incluso para Madrid, aunque abunden mucho las que se pasan de precio. Si lo tuviera que puntuar sería un 5/10.