¿AHORA ESCUCHAS?, JAZZ (2)

Enorme disco de Ella con Joe Pass.

Kosmos escribió:

Ella Fitzgerald & Joe Pass - ...Again

Enorme disco de Ella con Joe Pass.

Decir enorme es quedarse corto. En su día hice una reseña del mismo, que os refresco aprovechando la ocasión que me brinda Kosmos.

Ella Fitzgerald no necesita demasiada presentación, sin duda es una de las más grandes voces de la historia del Jazz. Por supuesto con permiso de Billie Holliday y Sarah Vaughan, pero Ella - la gran Ella - siempre me ha maravillado con prácticamente todo lo que ha grabado. La colección de songbooks repasando todo el repertorio del cancionero americano es legendaria, pero hoy vengo a hablaros de un trabajo bastante posterior, siendo ya más mayor a finales de los 70. Que habiendo nacido en 1917 tiene más mérito aún.

Joe Pass es un excelente guitarrista, delicado y armonioso. Un virtuoso del instrumento con una extensa discografía repleta de álbumes con las más altas valoraciones. Y es que además de tener un dominio de la guitarra espectacular, es el perfecto acompañante. Como sideman no tiene precio y estoy seguro que es aún más valorado por los músicos que por los aficionados.

La mayoría de los discos que Joe Pass grababa desde comienzos de los 70 los editaba un sello llamado Pablo, y aunque no conozco de quién fue la idea, a algún espabilado se le ocurrió combinar la gran voz de Ella Fitzgerald con la guitarra de Joe Pass y grabarlos con la calidad que lo hacía Pablo Records.

El resultado fue magnífico y resultó en una serie de álbumes increíbles, llenos de sutiles notas vocales como sólo Ella sabía dejar suspender en el aire, acompañadas de las notas de la guitarra de Pass, en perfecto segundo plano, sin avasallar, sabiendo acompañar...

No destaco ningún álbum por encima de los demás. Todos me parecen excelentes y discrepo totalmente con las valoraciones que realiza All Music que los puntúa mucho más bajo que yo. Afortunadamente y desde hace un tiempo, All Music ofrece sus valoraciones comparadas con las del público y en este caso el público puntúa mucho más alto que ellos estos trabajos.

Yo tengo claro por qué es. Y estoy seguro de que si vosotros lo escucháis en el momento propicio, lo sabréis también. Lo del momento propicio lo digo porque estos discos son para paladearlos tranquilamente, sin prisas, perfectos para terminar la jornada tranquilamente y dejarse llevar...

Fitzgerald & Pass... Again (1976, Pablo Records)

http://open.spotify.com/album/1m055OGpu3PvHezNudPQ61

   

Muy buena reseña DeBilbao  

Ella es mi vocalista favorita junto con Nina Simone, y por supuesto Billie y Sarah también, pero siento especial debilidad por Ella.

Para quién quiera hacerse con los maravillosos Songbooks a precio irrisorio, el sello NOT NOW MUSIC los está publicando en digipack de 3 cd´s cada estuche. No contienen libreto, pero el precio es imbatible (a 9,95 cada estuche más o menos) y la música que contienen es imprescindible.

DeBilbao escribió:Yo me estoy en el polo opuesto    dejándome mecer por el Viaticum del trío de Esbjörn Svensson. Dulce y relajante.



    

Yo vi uno de los últimos conciertos antes del trágico fallecimiento de su líder. Una verdadera pena, un concierto muy muy bueno.

Irakere - Live At Ronnie Scott´s
Jazz con sabor cubano, dirigido por Chucho Valdés, excelente a nivel de sonido, e interpretación.

Un no habitual del jazz, la estrella del pop Bryan Ferry, se adentra por estas latitudes con un trabajo recopilatorio de sus muchos años de carrera y éxitos, a ritmo de jazz de los años 20´s, interpretados por la banda fundada y liderada por él:

The Bryan Ferry Orchestra - The Jazz Age



Saludos.

Tremendo disco, muy divertido:

Esta mañana con el gran Gerry Mulligan.


Ahora con Chano Dominguez y Jorge Pardo y el clásico 10 de Paco.

Arturo O'Farrill, Live in Brooklyn

El hijo del legendario Chico, sigue las raices latinas del viejo pianista trompetista pero con una propuesta propia muy interesante y sólida. Este disco se disfruta de principio a fin.

Aunque ya tengo bastante avanzao el proyecto de JazzBai, hasta que no tenga terminado el diseño no me mudaré definitivamente allí y seguiré publicando mis reseñas como hasta ahora.

Mientras tanto, podéis ayudarme a revisar cómo va quedando en http://www.jazzbai.com Acepto todo tipo de sugerencias.

Ayer publiqué una entrada con vídeo y hoy me estrenado con una entrada un poco más extensa y con una narrativa más novelada, que haga entretenida la lectura. Requiere un poco más de trabajo y algo de documentación, pero así yo también disfruto y aprendo junto con vosotros.


Cuando en una semana escuchas un mismo álbum todos los días al menos una vez, es que ha llegado a ese lugar en en tu interior donde pocos llegan. Y eso me ha pasado esta semana con este trabajo de los hermanos Adderley titulado Bohemia After Dark, siento la necesidad de escucharlo y en cada pase descubro cosas nuevas.

Julian "Cannonball" Adderley y su hermano Nat vivían en Tampa, al sur de los EEUU, en la soleada Florida, y en el verano de 1955 decidieron acercarse a Nueva York para ver lo que se cocía por allí. Supongo que a pesar de que en aquella época no existían las redes sociales, las noticias de que algo grande estaba pasando en la gran manzana llegarían a todas partes.

En realidad el motivo del viaje eran los estudios de Julian, pues se había apuntado a la universidad de Nueva York para hacer un master para complentar su formación como profesor de múisca. Julian, a quienes sus compañeros de colegio llamaban el caníbal por su voraz apetito - de ahí lo de Cannonball - se fue con su inseparable saxo y Nat se llevó su corneta, y en muy poco tiempo se hicieron un nombre junto con el grupo de Oscar Pettiford en el Café Bohemia, un club situado en el Greenwich Village, en el 15 de Barrow St.

La historia del Café Bohemia es curiosa. Fue fundado ese mismo año 1955 por Jimmy Garofolo que no sé si con vista - seguro que sí - o de pura casualidad, se encontró con que Charlie Parker vivía justo al otro lado de la calle, e incluso llegó a firmar con él para que actuara en su nuevo local, pero el pobre "Bird" murió en marzo de ese mismo año y no pudo llegar a tocar. Aún así, había generado tanta expectación con el fichaje, que Garofolo tuvo mucho éxito y por allí han pasado desde Miles Davis hasta Art Blakey y sus mensajeros del Jazz o Kenny Dorham y sus profetas. ¡Qué época esa de mediados de los 50!

Así que los hermanos Adderley se encontraron con un New York que imagino que en aquel verano lloraría a Parker, y la noche de su llegada se fueron al club en donde estaba actuando la banda de Oscar Pettiford. Aunque fueron a escuchar música, Julian se llevó su saxo por miedo a que se lo robaran. Y eso fué providencial, pues aquella noche falló Jerome Richardson, que era el saxo habitual de Pettiford.

Al ver que no tenía saxo, Pettiford le invitó a participar a Charlie Rouse, que también estaba entre el público, pero este le dijo que no había traído el saxo. Pettiford vió a Julian con su saxo y le dijo a Rouse que le pidiera el saxo prestado, y ahí fué donde Julian tuvo su momento decisivo, pues en lugar de prestar su saxo, pidió permiso para sentarse con el grupo y aunque no fuera de su agrado, Pettiford accedió... y el caníbal les dejó a todos con la boca abierta.

El Jazz está lleno de historias maravillosas como esta, imagino que la emoción de Julian y su hermano después de aquella noche tuvo que ser inmensa. Y así comenzó la carrera imparable de Julian Cannonball Adderley, en el Café Bohemia.

El éxito tuvo que ser fulminante, pues en junio de 1955, grababa este Bohemia After Dark. Los primeros seis temas los grabaron en los estudios Beltone de Nueva York, Julian con su saxo alto, Nat con su corneta, Donald Byrd con su trompeta, Jerome Richardson con su saxo tenor y su flauta, Horace Silver con el piano, Kenny Clarke a la batería y Paul Chambers con el bajo. Las últimos 2 temas se grabaron en los estudios de Rudy Van Gelder en Hackensack, en la cercana New Jersey, y aquí se reunieron Julian, Nat, Chambers y Clarke junto con el piano de Hank Jones, en formación de quinteto.

La calidad de la grabación no es tan sobresaliente como en otras ocasiones, pero es más que suficiente para disfrutar de un contenido de altísima calidad, pues todos los participantes están al máximo nivel.

Hay un par de baladas memorables, una para cada hermano, el clásico estándar Willow Weep for Me de Ann Ronnel, interpretado deliciosamente por el saxo de Julian que muestra en este tema su característica forma de tocar, y el We'll Be Together Again de Carl Fischer en el que su hermano Nat va dejando caer las notas bien largas, notas que parece imposible extraer de la corneta.

Pero la línea argumental del álbum es el Hard Bop, y las composiciones originales de los hermanos Adderley. El tema Hear Me Talkin' to Ya, tiene un inmenso sabor a blues y aquí el que sobresale es el piano de Horace Silver. Es un tema para lucirse, y Horacio sabe aprovecharse de ello y te deja boquiabierto.

Podría seguir escribiendo sobre el resto de temas, desde el original de Pettiford que da título al disco y que tiene una melodía inconfundible, pasando por la divertida With Apologies for Oscar o el fabuloso final con el Caribeean Cutie, pero prefiero dejaros que lo escuchéis vosotros y juzguéis.

A mi me parece simplemente FABULOSO.

Cannonball Adderley: Bohemia After Dark (1955, Savoy)

http://open.spotify.com/album/1PXzbXdBnbNs3jjp6unybA

Hola,

Yujuuuu:



Saludos.

Dennis Chambers, Groove & More

Necesitaba una dosis de fusión ... y este disco no esta mal. Veta funky y RB. Sin caer en smooth en cualquier caso. Me gusta.

http://open.spotify.com/album/3Trvid1UyXXXrrec9w7kl9

Chet Baker

Va de bajistas.

Janek Gwizdala, It Only Happens Once

Interesante fusión, ligeramente experimental a veces, pero siempre estructurado.
Vale la pena darle una escucha.

Jeff Berlin, Low Standards

Un disco de versiones de estandars, si bien creo que Berlin es uno de los mejores bajistas electricos y permanentemente subestimado, en este caso creo que peca de un exceso de protagonismo. Se echa de menos un poco de variedad ya que el bajo como solista permanente tiende a "aplanar" demasiado. En consecuencia una clase magistral del bajo electrico. Una cosa por otra...   ... Bop-Fusion ??

Mark Egan, About Now

Cerrando los bajistas, estupendo este trio con su compinche Danny Gottlieb baterista con el que formaron la sección rítmica de alguno de los primeros Pat Metheny Group y Elements. Completa con Mitch Forman, pianista de sesión que me gusta mucho.

Disco relajado en general, ritmo medio, para escuchar tranquilamente y disfrutar.

http://open.spotify.com/album/7zWVmlhLHPbWRx4p8PLq2Y

Primer trabajo para el sello Dreyfus de este impresionante saxofonista alto italiano, con el piano de Pietro Lussu, el contrabajo de Pietro Ciancaglini y la batería de Lorenzo Tucci (no confundir con Emidio   ). Saludos

Esta entrada está también disponible en JazzBai http://www.jazzbai.com/ y de hecho será de las últimas que publique completamente por aquí, pero no os preocupéis porque seguiré pasándome por el foro y dejaré constancia de la publicación con un enlace directo a la misma.

También tengo previsto anunciar desde Twitter https://twitter.com/jazzbai la publicación, por lo que si me seguís por allí, tendréis información instantánea en cuanto la haya insertado en el blog.


Como nos recuerda el libreto que acompaña al CD, la vida de Eli Thompson - apodado Lucky - es una de las más enigmáticas de la historia del Jazz. Una odisea que tiene que ver con cuatro ciudades, dos instrumentos, big bands, y otras más pequeñas, popularidad, pobreza, cambios de estilos, trabajo con gente de la talla de Charlie Parker, Miles Davis o Stan Kenton, y largos períodos de inactividad.

Su discografía es amplia y aunque no soy muy amigo de las recopilaciones, esta que os acerco hoy realmente no lo parece y simplemente se trata de una reedición que realizó GRP de dos sesiones que Lucky Thompson llevó a cabo en 1956, una en formato de trío (temas del 1 al 4 y del 9 al 12) junto con el bajo de Oscar Pettiford y la guitarra de Skeeter Best, y otra en formato de cuarteto y quinteto (temas del 5 al 8 y del 13 al 16) junto con el trombón de Jimmy Cleveland, el piano de Hank Jones (5 al y Don Abney (13 al 16), y el bajo de Oscar Pettiford y la batería de Osie Johnson.

Lo bueno de artistas como Lucky Thompson es que además de intérpretes eran también compositores, y en este trabajo todas las composiciones son suyas o de Oscar Pettiford, por lo que el repertorio se aleja de los típicos estándares y se adentra en los terrenos de las composiciones originales, lo cual siempre me resulta muy apetecible por lo que significa como aventura musical.

Así que aquí tenéis nada más y nada menos que 16 temas con el fenomenal saxo de Lucky Thompson como protagonista absoluto, aunque tenemos algunos solos de altura en manos de sus acompañantes, que como podéis comprobar no son cuatro mancos precisamente.

La grabación no está mal, pero podría ser mucho mejor. Ahora que comienza a apretar el calor no lo he estado escuchando con auriculares, y me he dado el gustazo de escucharlo con los Audioengine A2 conectados a una tarjeta Asus Xonar Essence STX, que definitivamente será la que alimente a estos monitores que tan buen resultado me están dando en el equipo principal.

En Spotify no está el álbum de forma individual sino que lo tenéis en una edición diferente junto con otros dos álbumes más: Nothing But The Soul y Brown Rose. Si queréis ir directamente a Tricotism tenéis que ir directamente al tema 31, titulado Bo-Bi My Boy.

Lucky Thompson: Tricotism (1956, Impulse - 1993, GRP)

http://open.spotify.com/album/0haBymXI41GBDzidu8UNwg

Una entrada más disponible en JazzBai. Quienes sigáis el proyecto vía RSS en http://www.jazzbai.com/?feed=rss2 os lo anunciará vuestro lector, probablemente Feedly, y dntro de nada las anunciaré a través de Twitter mediante mi canal https://twitter.com/JazzBai con el hashtag #JazzBai así que si os apetece, podeis seguirme también por allí.



La revista Down Beat fue una de las pioneras en la promoción del Jazz y tras su nacimiento en 1943 en Chicago, pronto se convirtió en una referencia para saber quién era quién en el panorama del género.

El título de este álbum no peca precisamente de modestia, y ese First Place Again se refiere a que una vez más, Paul Desmond aparecía como número 1 en la lista de los intérpretes del saxo alto en Down Beat.

Sin embargo, la música que interpreta Paul Desmond en esta sesión maravillosa sugiere una aparente humildad y sencillez, aunque si uno se detiene a escuchar con atención, pronto se dará cuenta de que no es nada, pero nada fácil armonizar así.

La reunión es magnífica, y junto al saxo tenor de Paul Desmond tenemos la guitarra de Jim Hall, el bajo de Percy Heath y las baquetas de Connie Kay en la batería, que en aquel entonces formaban la sección rítmica del Modern Jazz Quartet.

Delicadeza, sutileza, suavidad, podéis buscar cualquier adjetivo similar que le irá como un guante a esta grabación de 1959 de la Warner y que podéis encontrar en Spotify en dos versiones distintas: la original junto con unos temas extras, y una remasterización posterior con los temas originales que suena algo mejor y que es la que he seleccionado para la entrada.

Un disco perfecto para un domingo a la mañana, tranquilo y sin sobresaltos. La selección de temas se compone de clásicos estándares, pero la interpretación los maneja de tal forma que a veces son prácticamente irreconocibles, algo que siempre me ha asombrado de Paul Desmond. Desde el East of The Sun con el que comenzamos el álbum hasta una versión de Greensleves, todo pasa por el tamiz del sonido Cool o West-Coast del alto de Desmond, que casi parece un instrumento distinto.

Un disco perfecto para un domingo a la mañana, tranquilo y sin sobresaltos.

Paul Desmond: First Place Again (1959, Warner)

http://open.spotify.com/album/3hP38cISQvqbRrtHRiJ7JL

Desmond es que es una de mis grandes debilidades, la mañana de domingo relajada para mi continua con este...



Un saludo

Gran disco de fusion musical, muy en la linea de Weather Report y Benavent con fuerte influencia de Pastorius.