Clones 25 ir

Por gentileza de Francis de 70 sound, he estado probando el Clones 25ir, un pequeño amplificador de menos de 20 cm de ancho y de fácil colocación. La primera impresión que me dio el Clones 25 ir es la de un producto de calidad, con un diseño de lineas rectas, sencillo pero atractivo y con unos mecanizados mejorables en algún aspecto de su diseño. Mención aparte haría del mando a distancia, precioso y robusto a la vez pero muy pesado lo que puede ser un inconveniente, una caída del mando puede suponer por su peso, una avería o como intentes pararlo con un pie descalzo, una lesión en el mismo. Para quienes tienen problema de espacio es un amplificador ideal por su tamaño, de fácil ubicación y que como plus tiene que, al tratarse de un clase E, no se calienta absolutamente nada. Fue probado en mi salón, un espacio de unos 15 + 12 m2 ya que son como 2 espacios rectangulares y que para nada es un sitio dedicado a la música, sin embargo no tiene problemas de resonancias ni vibraciones. Se ha probado con 2 cd, un Rotel y un Marantz que dispone de 2 Dac 1545 que le da un toque analógico. Mis columnas son de lo más normalitas unas B&W P5 serie descatalogada que lleva drivers de la serie 800 y Nautilus.
Dispone de un selector para 3 fuentes distintas y un control de volumen que se puede manipular desde el propio ampli y desde su mando a distancia.
Lo he probado con música Jazz, con Rock sinfónico (Pink Floyd) y clásica, fundamentalmente música de cuerda. Lo primero que notas es que sus 25 w. se quedan cortos para cajas de baja sensibilidad, las mías son de 90 db y no se empieza a escuchar hasta que el pote, de un total de 64 puntos, no llega hasta el 20, lo he tenido funcionando al menos con el pote a 45-50 y eso que no me gusta la música demasiado alta, se nota que lleva un previo pasivo con lo que no aporta ninguna ganancia.
Si tuviera que definir con dos palabras a este amplificador diría que es analítico sin ser frío.
La música clásica suena muy bien, instrumentos definidos, amplitud en la escena, el violonchelo suena muy natural y los graves del mismo suenan con contundencia sin emborronarse, sin embargo en algún pasaje de chelo en el que se enlazan sonidos graves con otros graves, se satura un poco cuando le subes el volumen, esto es normal en un amplificador de estos watios, cuando se bajan los ohmios es cuando más energía se necesita y no la puede dar. El violín suena fino y natural apreciándose los armónicos perfectamente.
El jazz, que para mí es de lo que mejor se escucha en un equipo cuando la grabación es buena, con este pequeño amplificador suena bastante bien, le falta un poco de presión y empuje, sobre todo a los graves a los que le falta cuerpo, es normal tratándose de 25 w., esto se nota en las vibraciones en el propio cuerpo y en las que me transmite el sofá donde estoy sentado.
Las voces suenan naturales, cosa que se agradece, apreciándose de forma clara y definida las diferentes tesituras y timbres de la voz así como el vibrato de una soprano, esto último delata a amplificadores que no reproducen el sonido con naturalidad.
Resumiendo, es un amplificador de fácil colocación y bajo consumo que destaca mas por sus agudos que por sus graves y que necesita cajas de alta sensibilidad.

Necesitaran de alta sensibilidad no, de altísima por lo menos 93 dB

Buenas tardes, en primer lugar agradecer a Confidencialist esta amable prueba. Solo me gustaría puntualizar con respecto al potenciómetro, su forma de trabajar. Es tal y como lo has descrito, ahí radica su naturaleza. Después de unas doscientas horas de uso es cuando el "juguetito" empieza a cantar de verdad. Lo curioso de todo es que con las cajas que mejor funciona es con la Stirling LS 3/5 V2 y con la Micra y Karis, curioso pero cierto. Física es física pero.....
A estos precios y para salas de no mas de 15 metros puedo afirmar sin menospreciar a ninguna marca que es una opción a tener en cuenta.
Las distintas pruebas internacionales así lo declaran.

Un saludo.


Blas Oliva.