Historia de Spendor y presentación de Spendor BCIII

La historia de una de las más prestigiosas empresas fabricantes de altavoces, Spendor, nace en el año 1969 de la mano de sus creadores, Spencer y Dorothy, un matrimonio de jóvenes ingenieros de sonido. El nombre de Spendor nace de la unión de las primeras letras de ambos nombres.  

A finales de los años 50 del siglo pasado, apareció en el mundo un nuevo formato de audio: el estéreo. Los viejos monitores de estudio no estaban preparados para los nuevos estándares, ni en calidad ni en tamaño. Este momento puede considerarse el comienzo del camino que finalmente condujo a la creación de los legendarios monitores de la BBC, que tanta fama y calidad han aportado al mundo del Hifi.

En aquella época se utilizaban principalmente altavoces grandes con conos de papel y su tecnología de fabricación no garantizaba un resultado estable, especialmente en estéreo.

En 1965 surgió una idea revolucionaria: fabricar difusores de plástico, ya que tiene propiedades mecánicas bastante adecuadas. Pero resultó que había coloración en el sonido de los difusores de plástico, y para eliminarla se les aplicaron capas de pegamento de goma por ambos lados. Encontrar una solución óptima requirió un enfoque no estándar y tomó mucho tiempo, porque cualquier idea tenía que pasar por una audición que corroborase su idoneidad, tanto para su fabricación como de su funcionamiento.

Antes de emprender su propia aventura empresarial, Spencer Hughes trabajaba a principio de los años 60 en el equipo de investigación acústica de la prestigiosa BBC. En estos años la BBC tenía unas estrictas normas para conceder una licencia propia de la BBC a un altavoz. Con esta licencia cualquier fabricante podría construir un altavoz certificado por la BBC. Para conseguir esta licencia opcional de fabricación, lo primero es que el altavoz debía tener un determinado tamaño mínimo y máximo para poder ser considerado un altavoz de estantería, ya que principalmente su uso iba a ser un estudio de grabación, con una medida más o menos estándar y con un punto de escucha bastante focalizado.

Otro punto no menos importante es que el altavoz debía reproducir una señal de audio de salida con la máxima fidelidad acústica respecto a la voz de un presentador en directo, ya que el principal uso de los mismos era para las retransmisiones de radio, por lo que el altavoz también debía reproducir fielmente todo el rango vocal hablado.

Al tiempo debía también ser capaz de reproducir fielmente todo el rango musical generado por la música en directo, tanto un concierto sinfónico reproduciendo fielmente toda la orquesta, como uno de jazz con un sólo vocal y un piano, con la complejidad que ello supone si buscamos la perfección acústica.

Esto hacía que inicialmente ningún monitor comercial consiguiera cumplir con estos estrictos requisitos de la BBC, ya que se requería una perfecta transparencia y neutralidad en el sonido, y eso no significa que la acústica producida en ese momento fuera mala, sino que los estándares corporativos requeridos eran verdaderamente complejos para ser cumplidos.



Esta complejidad provocó que un ingeniero laborioso y con talento, como Spencer Hughes, quedase completamente enganchado ante un reto semejante y se involucrase en conseguir el diseño adecuado, dedicando a esa tarea sus horas libres durante mucho tiempo, primero como trabajador de la BBC y luego en su propia fábrica.

Pero antes de ocurrir esto, y como ingeniero de sonido de la BBC, Spencer participó activamente en el desarrollo del altavoz BBC LS3/5a, que fue uno de los proyectos más ambiciosos de la época y que resultó históricamente muy importante porque finalmente el proyecto consiguió llegar también con mucho éxito al mercado minorista.

La sección del Departamento de Investigación de la BBC involucrada en esta operación estaba dirigida por el Sr. Shorter y contaba también con el Sr. Harwood, que luego formó parte esencial del equipo de Harbeth Acoustics, segundo al mando y con Spencer Hughes completando el equipo de investigación.

Altavoces LS3/5a



Una vez logrado el proyecto de los LS3/5a desde la BBC, Spencer se propuso el objetivo de conseguir fabricar un altavoz de acuerdo a esa licencia BBC LS3/5ª, pero de manera particular y con una empresa propia ajena a la BBC.

Su idea era poder conseguir que aquellos consumidores audiófilos interesados pudiera disfrutar de un altavoz de altísima calidad en su casa, garantizándoles que conseguirían exactamente la misma firma sonora que los ingenieros de sonido de la BBC escucharon mientras grababan la versión original del tema, pero con un diseño diferente al ya creado con el LS3/5a.

Ya existía una alternativa en esa época y era el altavoz electrostático cuádruple acústico ESL 57, un altavoz de una altísima calidad, pero con el inconveniente de que era muy difícil de amplificar y además demasiado grande pero, sobre todo, era excesivamente caro para la gran mayoría de los audiofilos.

Altavoces Quad ESL 57


Las investigaciones privadas de Spencer dieron como resultado una membrana hecha de poliestireno ("bextreno") para altavoces de rango medio y woofers, que lograba una reproducción vocal e instrumental muy superior al estandar de la época. Su esposa Dorothy añadió a los avances de Spencer un nuevo sistema de bobinado para el altavoz con un resultado también superior respecto a la calidad del sonido.

Todo ese trabajo llevó a la fabricación por parte de Spendor de su primer altavoz, denominado Spendor BC1, que Spencer diseñó mientras aún trabajaba para la BBC, y cuyo diseño finalizó al tiempo que abría su propia empresa “Spendor”.

Spendor BC1



Este altavoz BC1es considerado por muchos una obra maestra del sonido y se suele nombrar como uno de los mejores altavoces de estudio de todos los tiempos. Sin embargo, conviene aclarar que el Spendor BC1 no fue, tal y como muchas veces se ha hablado y comentado en diversos foros hifi, una evolución del altavoz BBC tipo LS3/6 sino todo lo contrario y lo explicaré más adelante.

El primer par de BC1 caseros, se construyeron utilizando los primeros conos de Bextreno desarrollados por Spencer y su mujer y drivers Celestion HF1300. Los gabinetes eran más pequeños que el modelo final del BC1 y las pruebas de escucha iniciales indicaron que el rendimiento podría mejorarse aumentando el tamaño, de ahí que se modificara el diseño actual hasta construir el modelo definitivo posteriormente.

En ese momento todo se hacía por diversión y prácticamente sin herramientas profesionales. Según comentó en su momento Spencer, los primeros conos de Bextreno se construyeron usando un formador de vacío casero, creado gracias al uso de una estufa eléctrica casera, un compresor funcionando a la inversa y una cama de hierro.

Como curiosidad cabe destacar que el momento de la creación del primer BC1 por parte de Spencer coincidió con el inicio de la época "rock", en donde empezaban a demandarse altavoces con más potencia de lo que daba el BC1, por lo que el diseño inicialmente fue desestimado por la BBC para ser fabricado en masa.

El manejo de la potencia siempre fue un problema inicialmente para los BC1. Durante la fase del diseño, los tweeters nunca cambiaron, pero hubo varios diseños del woofer de Bextrene. Inicialmente fueron los Alnico Blues, que tenían una potencia nominal de unos 25 w. Luego salieron los denominados Alnico Reds, con una potencia nominal algo mayor, y también una potencia final más elevada. Finalmente, las últimas series de producción pasaron a ser de Ferrita.

Spencer era bastante consciente de que los BC1 estaban diseñados para ser altavoces de estudio de bajo volumen, destinados a reproducir mayoritariamente música clásica, pero el nuevo mercado floreciente era el del 'rock', y esto requería una mayor capacidad de amplificador y controladores más resistentes.

Pero aún con estos problemas en el manejo de la potencia que los hizo ser desestimados por la BBC, el tamaño y forma del altavoz si que les parecía adecuado a los técnicos de la BBC, y como Spencer era un buen tipo, les cedió el diseño de la caja y eso posteriormente dio pie a la fabricación del LS3/6. Por tanto, es el LS3/6 el que es una copia del BC1 original y no a la inversa.

Como Spendor era ahora una empresa comercial, se acordó que se pagaría una regalía a la BBC por cada par de altavoces BC1 producido. Esto fue en reconocimiento al trabajo que había realizado Spencer en el altavoz mientras aún trabajaba en la BBC.

El prototipo del LS3/6 basado en el BC1 se ofreció a varias empresas comerciales y finalmente fue adquirido por Rogers, entonces bajo el control de Jim Rogers. Con la aprobación y un poco de ayuda de la BBC, Rogers añadió el tweeter Celestion HF2000 al diseño inicial.

Rogers LS3/6


Estas idas y venidas generaron cierta rivalidad de calidad y sonido entre ambas marcas Spendor y Rogers, haciendo que el mercado se animase y que dieron pie a muchas comparativas en las revistas especializadas de la época, sobre los modelos con patente BBC de ambas empresas.




Aunque es verdad que el Spendor BC1 salió en una época en donde el incremento de la potencia empezaba a estar de moda, también es cierto que eso también lo envolvió en un aura como altavoz de culto entre los audiófilos más exigentes, que no estaban dispuestos a cambiar sus amplificadores de válvulas poco potentes por los nuevos "monstruos" transistorizados que empezaban a venderse exitosamente en el mercado del audio.
Es cierto que, tal y como muchos audiófilos de alto nivel recomiendan, los Spendor BC1 como mejor suenan es movidos por amplificadores valvulares.

Usar unos Spendor BC1 con amplificadores de transistores es visto como un sacrilegio por la gran mayoría de los aficionados más puristas, aunque yo tengo mis dudas, sobre todo porque no me gusta pertenecer a ninguna secta y en su momento utilicé de manera exitosa un Forté Audio model A (50w por canal en clase A pura), para mover mis Spendor BC1 maravillosamente bien. Soy todo un sacrílego.

De todos modos, el BC1 fue un éxito de ventas a nivel europeo desde su lanzamiento, ya que se convirtió rápidamente en el monitor de estudio favorito por casi todas las emisoras y estudios de grabación del momento.
Pero como las modas también son importantes, al BC1 le siguió el BC2, que básicamente consistió en una versión de alta potencia del BC1, y cuya principal diferencia es la de incorporar una bobina móvil más grande en el controlador principal. Sin embargo, el BC2 no cuenta con tantos admiradores como el original BC1, y por algo será. El BC1 fue un modelo muy longevo, ya que se siguió fabricando ininterrumpidamente y casi sin cambios hasta el año 1994.

De todos modos, en estos años se estaba produciendo a nivel mundial una lucha de poderes entre las grandes empresas de audio. Por un lado estaba la todopoderosa industria americana, con JBL a la cabeza, que querían imponer sus productos a nivel mundial, pero por otro encontramos a la no menos potente industria inglesa, que además menospreciaba claramente los productos americanos de audio tachándolos de generar un sonido tosco y poco refinado, con exceso de graves y falta de detalles.

Esta lucha era tan evidente que en el año del lanzamiento de los Spendor BC1, se produjo una reseña por el legendario J.Gordon Holt, fundador de Stereophile y gurú del momento para la industria del audio americana, en la cual y por decirlo de manera fina, los clasificó como producto de segunda categoría.

Aquí hay un enlace directo a esa reseña.
Review Spendor BC1

Lo cierto es que hay un abismo entre las escuelas inglesas y americanas, pero también es igual de cierto que no es lo mismo escuchar un concierto de una orquesta filarmónica, que un concierto de AC/DC, y sobre gustos ya lo dice el refrán, no hay nada escrito.





Por tanto y vista la evolución del mercado, con el paso del tiempo y para un uso doméstico el BC1 empezaba a no resultar tan idóneo como lo era para el uso en el estudio de grabación. Muchos aficionados achacaban al BC1 una falta evidente de graves, aunque todos coincidían en lo sorprendente y detallado de su parte media y alta. Hay que pensar que para el estudio de grabación, una sobrecarga de graves resultaba demasiado pesada para largas sesiones de trabajo, por lo que tiene su lógica que éstos no fueran demasiado intensos, pero para disfrutarlos en casa, también era comprensible idear una mejora en la reproducción de las frecuencias bajas.

Entiendo que también se pensaría en que no todos los aficionados escucharían música de cámara o sinfónica, lo que relegaba a los BC1 a cubrir sólo un pequeño sector del comprador final.

Escuchando los BC1 a niveles bajos encuentras una resolución muy fina de los detalles, junto con una gran precisión de los tonos medios y claridad instrumental general. Pero si aumentas el volumen, hay algo de "nasalidad" que comienza justo donde normalmente aplicas la ganancia de volumen. Si los empujas más hacia arriba de ese punto, empezarán a graznar ya que a estos altavoces no les gustan los niveles de interpretación de los conciertos de rock, son para una escucha a bajo volumen desde un sofá y tomando un buen brandy a oscuras.

Desde Spendor y usando todos los conocimientos adquiridos en esos primeros años, siguieron desarrollando y estudiando como evolucionar el BC1 de manera exitosa y contentar también a aquellos que demandaban una mejor y más completa respuesta de graves, pero sin perder el carácter detallado y ordenado de los medios y agudos.

Todo esto dio como fruto la fabricación de los Spendor BC3, que intentaban contentar a un abanico más amplio de oyentes que los que estaba destinado el BC1. Sobre todo, el avanzar también en la posibilidad de utilizar amplificadores transistorizados en lugar de valvulares para moverlos.

El BC3 tiene 4 vias y es mayor de tamaño que el BC1 que cuenta con 3 vías. El primer BC3 se fabricó en 1979 y su diseño está basado en el BC1.

Spendor BC3 o BCIII

Usa un controlador adicional de 12" para el woofer y cuenta con el sonido tradicional de la BBC, aunque con mas personalidad y aplomo, tanto en agudos como en graves. Se fabricaron para ser colocados en unos soportes a medida y con ruedas, lo que facilita su movilidad y ubicación.

En mi modesta opinión como simple aficionado, los Spendor BC3 me dan todo lo que necesito. Esto lo digo después de muchos años y de haber escuchado muchos altavoces diferentes.
Para mi gusto, efectivamente los BC1 eran algo "delgados" en su respuesta de graves, y finalmente acabé vendiendo los míos, aunque también es verdad que ahora me arrepiento enormemente de haberlo hecho porque también eran parte esencial de los  inicios del Hifi, aunque fuera meramente como simple colecionista.

Hay que explicar es que los Spendor BC3 son altavoces muy exigentes con la amplificación, aunque este punto es harto conocido y debatido en múltiples foros de audio. Si los asocias incorrectamente puedes encontrar que suenan algo fríos y demasiado analíticos.

También creo que es justo decir que, si prefieres una respuesta más plana y si tienes amplificadores de válvulas, son mejor opción los Spendor BC1 o incluso unos KEF 105.
Como digo, si quieres que los graves de los BC3 cobren vida y que los agudos se suavicen, es necesario aplicarles mucha potencia, control y reserva de energía. Yo me decanto por etapas potentes Yamaha o Luxman, pero curiosamente como mejor han sonado fue con el combo Sansui BA3000 + CA3000, aunque “sólo” entregaba 170w por canal.



Una vez consigas emparejarlos correctamente con el amplificador o etapa adecuados, el resultado que te espera es brutal en todos los aspectos. Es entonces cuando los Spendor BC3 te recompensan con un sonido dinámico preciso, natural muy cercano al carácter electrostático, con un rango medio excepcional y un carácter general apabullante.

ESPECIFICACIONES DE LOS SPENDOR BCIII
El Spendor BCIII es un diseño de 4 vías basado en el clásico BCI pero que utiliza un controlador adicional de 12" para refuerzo de graves.

Tipo: sistema de altavoces de 4 vías y 4 controladores
Respuesta de frecuencia: 30 Hz a 20 kHz
Potencia: 70W
Frecuencia de cruce: 700, 3000, 13000Hz
Impedancia: 8Ω
Bajo: 1 cono de 12"
Medio bajo: 1 cono de 8"
Altavoz de agudos: 1x HF1300
Súper tweeter: 1 x HF2000
Dimensiones: 31,5 x 15,5 x 15,5 pulgadas
Peso: 75 libras

Cuando se lanzó el BC III en 1973, los anuncios de Spendor lo describían como "Una extensión y refinamiento del BC I y BC II", mientras que Thomas Heinitz, decano de los consultores del HiFi en aquellos días, usó el siguiente titular "Hey, gran Spendor' en donde hablaba maravillas de ellos.

Tiene un controlador de 8 pulgadas con bobina móvil de 40 mm, que funciona en su propia cámara sellada como una unidad de rango medio, mientras que la unidad de graves de 12 pulgadas está colocada de forma refleja mediante un puerto cuidadosamente diseñado. El punto de cruce fue de 700 Hz. La unidad de 12 pulgadas se monta en la parte posterior del deflector y el recorte tiene los lados rectos para proporcionar un grado de carga de ranura, controlando la dispersión y, por lo tanto, mejorando su integración con el rango medio.

Para los registros superiores, el BC III utiliza el Celestion HF1300 como unidad principal de alta frecuencia, con un tweeter Celestion HF2000.
El BC III se debe colocar sobre un soporte para lograr una altura óptima (tiene uno de serie fabricado a medida para ellos y que yo conservo) y usa un poco común conector XLR con bloqueo en lugar de conectores tradicionales.

En mi opinión, aparte de una precisa y controlada respuesta de graves, el punto fuerte de los BC3 es la buena imagen estéreo que generan. Creo que su anchura es parte importante del resultado sonoro final ya que se asemeja a un deflector infinito. Siempre se ha comentado que una imagen estéreo superficialmente nítida en realidad se produce por inconsistencias de fase creadas entre la salida principal del controlador y los efectos de difracción del gabinete. En el BCIII tuvieron muy en cuenta el diseño, incluso las formas de los recortes del deflector se diseñaron activamente para minimizar cualquier interacción que arruinase el resultado final.







El resumen final para mi es que los BCIII cuentan con una respuesta en graves de las más bonitas y precisas que he escuchado nunca y las voces e instrumentos aparecen muy bien ubicadas, generando un escenario sonoro muy natural y adictivo y un sonido extremadamente rico y armónico.



Otra característica impresionante de estos altavoces es que llenan por igual un espacio amplio y abierto, del mismo modo que lo hacen con un espacio pequeño y cerrado para escuchas en campo cercano.

Y volviendo al tema de la amplificación y la dificultad que tienen los BCIII para ser movidos correctamente, desde Wireless World hace décadas un prestigioso ingeniero de sonido probaba cada amplificador primero con una pareja de Spendor BCIII, comentando que si el amplificador que probaba podía manejar bien los Spendor BCIII, ya tenía claro que podrían manejar cualquier altavoz doméstico sin problema.

Muy buen aporte! Gracias, Thunder!

Esas Spendor BC1 me encantan. Las tiene un amigo, amplificadas por una etapa Yamaha M2 de 240 watios y no desprecian para nada esa dosis extra de potencia. Las he escuchado en su casa con otras amplificaciones a transistores menos potentes (incluida una Yamaha M4 de 120 w) y a los dos nos gustó más la M2.

Tienen un sonido vivo, crujiente y neutro al mismo tiempo. Las comparé allí varias veces con unas Proac EBS y unas Klipsch Cornwall, ambas de tamaño superior, pero las Spendor BC1 no se quedaban atrás y llenaban la sala perfectamente. A mi fueron las que más me gustaron. Lástima que no tenga espacio para ellas, porque suelen encontrarse a precios bastante asequibles.

Saludos

Voy a ver si encuaderno estos "fascículos" de la enciclopedia del audio vintage. Gracias por estos aportes!!

Coincido en los graves bonitos y como pocos de las BC3 pero en lo demás...bueno...muchas cajas de la misma época las sobrepasan.

Yo siempre digo que cada uno tiene su propio gusto y criterio.

Si no fuese así sería muy aburrido un foro, ya que todas las opiniones serían coincidentes.

Además siempre hago hincapie en que mis valoraciones son siempre desde mi gusto particular.

Es verdad que hay muchos otros altavoces de esta época que me resultan interesantes, (tengo más de 20 pares), Kef, Tannoy, Klipsh, Celestion, Rogers, Quad, Mission, pero también es cierto que para mí los Spendor BC3 son los que más satisfacciones a nivel general me aportan.

Pero ya sabemos que decir que un altavoz es el mejor del mundo es imposible. Si acaso el mejor para cada uno, aunque eso genera millones de posibilidades.

Es como el anuncio de la tortilla de patatas. La mejor después de la mía.

Enhorabuena por el entretenido reportaje.
Abrazos, lo he disfrutado

He tenido las spendor BC2 y las spendor SP1 y siempre me gustaron mas las SP1.En este momento escucho solamente auriculares por problema de espacio.
Los ingenieros que diseñaron estos modelos buscaban reproducir el sonido en analogico lo mas real y natural posible.La digitalizacion hizo que se centraran en adaptarse
a otro tipo de sonido ,con lo cual se perdio la magia para siempre.

Hola,
He leído por encima las aportaciones de los compañeros entradas desde el pasado viernes, pero he dejado hasta esta tarde la lectura de este excelente hilo porque mi olfato de historiador me decía que era mejor dejarlo para cuando tuviera un buen rato para disfrutarlo, como así ha sido. Es bien cierto que tampoco es una sorpresa viniendo de quién viene, porque ya nos tiene acostumbrado a disfrutar de su vena de relator-historiador documentado, trufado con su inmensa afición a todo tipo de aparatos relacionados con la reproducción de la música. Se agradece, y mucho, el lenguaje ameno y didáctico a la vez, pero no menos que huya de posiciones extremas a la hora de transmitir sus impresiones. Siempre en modo respetuoso nos deleita con sus comentarios. Otra razón más para ser miembro de este foro, que como las personas que lo formamos tiene virtudes y defectos.
Gracias compañero por estos ratos.

Excelente hilo
Muchas gracias por ello y felicitaciones a todos

Pues muy agradecido a todos por vuestras palabras, en especial a Odisea.

Me resulta muy entretenido el hacer las presentaciones, sobre todo porque muchos de los aparatos que presento apenas tienen análisis técnicos en español y es complicado encontrar información sobre ellos de cara a conocerlos mejor, ya que son aparatos que cuentan con muchos años a sus espaldas y eso dificulta mucho encontrarlos en perfecto estado para poder analizarlos.

Pero me alegra comprobar que hay algunos de vosotros que también les gusta recordar estos viejos aparatos y a los que os resulta interesante leer estas aportaciones, lo que hace que no queden en saco roto.

A veces he pensado no hacerlas porque no hay mucho movimiento en el subforo vintage y tampoco es plan de saturar el mismo, que no me gusta monopolizar las cosas, pero por otro me da mucha pena que la participación de este subforo decaiga y apenas tenga aportaciones, lo que inevitablemente lleva a que la gente entre cada vez menos.

Y mientras escribo esto, estoy escuchando a Zucchero junto a Pavarotti interpretando "Nessun dorma" en mis Spendor BCIII y deleitandome disfrutando de un sonido mágico mientras me bebo un té. Los que comparten esta afición me entenderán perfectamente.

Muy  buenas  a  todos.
Nunca  he  participado  en  el foro aunque  llevo  leyéndolo  mucho  tiempo.El  caso  es  que  esta  vez  no  he  podido  dejar  de  comentar  porque  el  artículo  es  magnífico. Da  gusto  leer  cosas  así.

Muchas  gracias  al  autor  del  mismo por  que  realmente lo he  disfrutado  mucho.