Pierre Hantaï

Creo que ustedes no han tenido la oportunidad de escuchar las Golberg de Pierre Hantaï, son , según mi opinión sublimes. Con clave, que es como la escuchó el Maestro.
Lo he visto en directo dos veces, la segunda con El clave bien temperado. La primera en Girona y la segunda en Barcelona. Tengo un colega que vino en avión desde Valladolid solo para los conciertos. Bueno, también hay que decir que éste colega tiene 34 versiones de las Golberg ¡¡¡¡¡

Salud

Buenos días. Dispongo de varias versiones de esta obra fundamental en cualquier discoteca. La de Hantaï está a la altura de las de Leonhardt y Gould, éste al piano. Las tres son muy buenas, y merecen un sitio en nuestros estantes, luego ya es cuestión de matices en nuestras preferencias. Es una obra larga y compleja, y en otras versiones no tan buenas, encuentro aciertos en alguna variación, que están a la altura de los mejores, o superior, por ejemplo en la de Van Belder, en el sello Brilliant.
Saludos

Hantaï ha grabado dos versiones de las Goldberg, una en 1993 y otra en 2003. Desconozco que tipo de aproximación hizo en el concierto de Girona, pero para mí en la segunda versión añade unos cambios de tempo continuos que tengo que madurar un poco antes de admitir... Creo que le funciona mejor en las piezas más rápidas (como la Variatio 10) que en piezas más lentas (como la Variatio 7). Globalmente, me gusta más la primera grabación, si quieres algo más académica en el tratamiento, pero en cualquier caso las dos son excelentes. Creo que el problema con las Goldberg es que hay tantas grabaciones que cada músico al enfrentarse a ellas tiene que buscar algo que le diferencie de los demás, y si además las graban dos veces ya ni te cuento.
En clave a mi también me gusta mucho la grabación de Celine Frisch, y las dos de Scott Ross, estas ya del siglo pasado.

Llegué a las Goldberg, creo que como la gran mayoría, a través de las grabaciones de Glenn Gould, o sea que no puedo traicionarle del todo, pero la verdad es que ahora ya no oigo su versión (ninguna de las dos..). En piano, me quedo con la András Schiff.

Y por supuesto, si he de señalar con el dedo una que bajo ningún concepto se puede admitir, pienso que las versiones de Lang Lang pueden lanzarse directamente a la hoguera. De hecho, pienso que deberían quemarse todos los prensados, todas las copias en digital y especialmente el máster (El disco contiene dos versiones íntegras, la segunda en directo; la crítica es válida para las dos). Tiemblo al pensar que alguien en un futuro más o menos lejano recupere esta pieza en esa grabación, y pueda llegar a pensar que Bach compuso esa música. Difícilmente se puede oir una versión más traidora, edulcorada, almibarada y efectista de esta pieza. Pienso que Lang Lang confunde interpretación con creación. El buen intérprete no se percibe en la buena interpretación; lo importante es que, toque quien toque, oigamos a Bach. Con Lang Lang estamos oyendo a Lang Lang, que es fantástico creando música de ascensor.
(Pero vaya, para gustos colores...)

Saludos,

Yo tengo la versión de Hantaï de 2003 para Mirare.
También las dos de Leonhard (una de ellas firmada por él cuando vino a Valencia a interpretarlas, cosa que después no hizo (cambió el programa a última hora).
En las de Leonhardt de 1978, para Harmonia Mundi, se come alguna repetición, no sé si sería para que la obra cupiera holgadamente en un LP. Prefiero las que grabó para Telefunken (Teldec) en 1965. Leonhardt es súper escrupuloso y espartano con las partituras. Cosa que está muy bien por parte del gran maestro, pero que no casa demasiado con el espíritu de libertad del intérprete que entonces imperaba (cuanta más antigua es la música, más libertad había en su interpretación).
Las de Hantaï me encantan. Creo que es muy respetuoso con la obra y a la vez suele adornar las repeticiones (que para eso están escritas, porque repetir lo mismo es algo ilógico). En la ópera barrocas, en las arias "da capo" el cantante daba rienda suelta a su arte en la repetición añadiendo todo tipo de trinos, coloraturas y demás fuegos de artificio. Cuando escuché la repetición de la primera variación me quedé flipanding. Además le da a la obra un aliento poético que, para mí, es maravilloso.
Con respecto al gran Glen Gould, pues eso, tengo sus dos versiones y ahí están, ocupando su sitio en la estantería. También prefiero a András Schiff para el piano.

Saludos

En mi caso, prefiero las versiones a piano que las de clave. Seguramente Bach si hubiera tenido uno, lo hubiera empleado. Esto no quiere decir que le haga ascos a una buena versión al clave pero la perfección del piano como instrumento no tiene rival.

Mis favoritas son la segunda de Gould, de Andras Schiff me gusta todo lo que grabó del venerable compositor. También me gusta bastante Murray Perahia, su última versión, muchísimo la primera de Rosalyn Tureck, Angela Hewitt o Gavrilov.

Al clave Hantai y la vetusta versión de Wanda Landowska, pese a su sonido.

Saludos

PS Wilhelm Kempff, al final de su carrera, grabó una versión que, pese a sus detractores, posee una fluidez que me encanta.